Para que la transición energética sea eficiente es necesario actuar ya, establecer políticas y regulaciones consecuentes y acelerar el Green Deal y la digitalización. El objetivo es ser climáticamente neutros a partir de 2050 y, para ello, tenemos que desplegar las tecnologías ya competitivas y desarrollar las tecnologías incipientes con una política industrial inteligente. La descarbonización del sector energético es un reto ambicioso pero posible. En este sentido, se deberían eliminar las barreras actuales a la descarbonización mediante una reforma fiscal en la que pague “el que contamina” y con una tarifa eléctrica limpia de cargos no relacionados con el suministro. Necesitamos también una simplificación y aceleración de las autorizaciones administrativas y que el diseño de ayudas de eficiencia sea en función de la contribución real a los objetivos climáticos, emisiones y renovables. La COVID-19 no va a debilitar sino reforzar las políticas climáticas.
Estas son las conclusiones que ha expuesto el responsable de Coordinación y Estudios de IBERDROLA, Francisco Laverón, durante la sesión de Diálogos FAES ‘Cómo conseguir un sector energético sin emisiones en Europa y España’ en la que ha participado junto al socio fundador y CEO de Análisis Económico Integral, Miguel Marín.