El expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, José María Aznar, ha afirmado hoy en Málaga que “España ha comenzado a divergir de Europa. La economía mantiene su senda de desaceleración”. Según ha explicado, “la aspiración española durante décadas fue la convergencia. Es decir, cómo convergemos con los países más desarrollados en términos de renta per cápita, de producción y competitividad”. “Lo ideal sería hacer grandes pactos para estabilizar la economía española. Pero a falta del pilar centroizquierda, solamente una fuerza anclada en la democracia, en la libertad y en la Constitución, puede mejorar nuestra economía y sociedad”, ha añadido.
Para Aznar, “el proceso de divergencia no se va a resolver con políticas populistas, gastando más, aumentando la deuda y el déficit, sin aumentar la productividad”.
El expresidente, que ha hecho esta reflexión ante más de 300 empresarios en la jornada organizada por el Círculo Empresarial de Málaga, considera inaplazable llevar a cabo una serie de reformas. Así ha enumerado la necesidad de tomar muchas decisiones en política fiscal, económica, empresarial y laboral. “Hay que decir cómo se mantienen las pensiones en nuestro país y cómo hacer una política energética sensata”, ha destacado.
“Lo ideal sería hacer grandes pactos para estabilizar la economía española. Nuestro problema es que tenemos una alta inflación, baja productividad, un nivel de endeudamiento de 120% y un nivel de déficit del 5%”, ha subrayado.
LIDERAZGO
En su intervención ante los empresarios, José María Aznar ha vuelto a apelar a la necesidad del liderazgo criticando que “España es el único país del mundo apoyado por personas que quieren destruir el país. Y está liderado por personas que son el ejercicio del antiliderazgo”. “El liderazgo es la renuncia a posiciones propias en favor del bien común, no el sacrificio del bien común en beneficio de posiciones propias”, ha apuntado.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL
Aznar se ha querido referir, asimismo, a la revolución tecnológica que estamos viviendo. En su opinión, nos encontramos ante un “capitulo absolutamente nuevo en la historia de esta revolución que es la inteligencia artificial”. “Es la primera vez en la historia en que el ser humano cede parte de la razón. Hasta ahora eso no había sucedido”, ha alertado, para añadir que “las máquinas en la revolución industrial, la revolución del vapor, o cualquier otra revolución, siempre habían dependido del ser humano. Y la razón humana es la razón de nuestra existencia”.
Pero “hoy cedemos parte de nuestro razonamiento a las máquinas. El ser humano ha sido capaz, con su inventiva, con su creatividad, de crear máquinas que piensan y llegan a conclusiones de una manera y con unos procedimientos que no somos capaces de entender”, ha señalado el expresidente que cree que el mundo del futuro estará basado en el diálogo entre las personas y las máquinas, y «todavía no está decidido quién va a tener una posición más ventajosa».
