Antes de la pandemia del coronavirus, América Latina ha sido el escenario de una enorme inestabilidad política. Desde hace mucho tiempo, durante décadas, muchos países de la región se enfrentaban a los problemas estructurales. La crisis del COVID-19 ha afectado de diferente manera a diferentes países, pero en todos ellos puso de relieve la fragilidad de sus sistemas políticos y sanitarios.
China va a salir ganadora de esta pandemia. Las democracias liberales de América Latina están amenazadas. Si no hay crecimiento, si la pobreza que deje la pandemia es grave, si continúa la inestabilidad institucional y aumenta la criminalidad, los países latinoamericanos van a optar por alternativas de gobiernos autocráticos pero tecnológicos y van a terminar considerando viable la posibilidad de instaurar un régimen parecido al chino. En unos cinco años, las élites van a querer orden y las clases bajas, crecimiento. Se van a sentir atraídos por el modelo chino. España que no debe olvidarse de América Latina. Los españoles tiene que hacer un esfuerzo por volver a encontrar a América Latina. No deberían sentirse culpables de nada, sino orgullosos de lo que han hecho y no caer en la tentación de ir tumbando estatuas de quienes nos pudieron dotar de una cultura, una lengua, una religión, una literatura y una música. Estas son las conclusiones a las que han llegado el eurodiputado Leopoldo López Gil y el columnista del diario El MundoJohn Müller en esta nueva sesión de Diálogos FAES sobre la situación de América Latina tras el Coronavirus.