Anotaciones FAES 6
El PSOE ha querido certificar esta semana su condición de partido antinacional y abonado sin remedio a la mentira. Tras una Convención en que prometía “avanzar” dando “un impulso de país”, no pasan ni cuarenta y ocho horas sin confirmarse que, cuando Waterloo aprieta, los socialistas añaden a su dimisión ideológica claudicaciones proporcionales a esa presión. Así resulta desde hace dos décadas. En La Coruña se ratifica un rumbo emprendido en Santillana, proseguido en Granada y culminado en Barcelona1; jalones de procesos simultáneos y mutuamente implicados: la jibarización del socialismo discurre en paralelo a su progresiva subordinación a los nacionalistas. En su último documento, el PSOE llama “cogobernanza” a confederar un Estado en trance residual. Y un par de días después transacciona enmiendas para que el traje a medida de la amnistía no tire de la sisa ni a terroristas encausados ni a terroristas sentenciados: los señores de los CDR y de Tsunami llevarán bien planchada su responsabilidad criminal. Tampoco hay una arruga en la lisa indignidad con que el PSOE cruza “líneas rojas” a velocidad de crucero. Más que incoherencia, rasgo de carácter: a estas alturas, en la aldea más remota de la España vaciada ya saben que cuando un ministro canta línea no hay que mirar al diccionario sino al bingo donde se rifa la nación. Pero que conste: pactar la amnistía de terroristas sentenciados en firme el día que se cumplen 29 años del asesinato de Gregorio Ordóñez es levantar acta. Vale como certificado de defunción. Sin latido ni fibra moral, el PSOE fallece como partido de Estado desmintiendo su eslogan póstumo. ¿Impulso de país? Ni pulso ni país.
[1] En cada una de esas ciudades el PSOE organizó cónclaves y publicó declaraciones para posicionarse ante el “problema territorial”. Al respecto, véase el libro de un socialista histórico como Luis Fajardo Spínola, que estudia el inicio de ese plano inclinado hacia la deconstrucción del Estado autonómico: ¿Hacia otro modelo de estado? – Los socialistas y el estado autonómico.Civitas 2009.