Anotaciones 15
Después de orquestar una vergonzosa campaña de descalificación contra la presidenta de la Comisión de Control Presupuestario del Parlamento Europeo por indagar sobre la gestión de los fondos de recuperación; después de presentar al comisario de Justicia como una suerte de quintacolumnista del PP, ahora los socialistas se ponen castizos y por medio de Carmen Calvo hacen saber a la delegación de la Comisión de la Mujer de la Cámara de Estrasburgo que no se entrometan en la política española.
Entrometerse, según Calvo, es interesarse por ese naufragio jurídico y social llamado ley del ‘sí es sí’ que ha producido rebajas generalizadas de penas a agresores sexuales y la puesta en libertad de un buen número de ellos. Los socialistas, que dicen estar tan preocupados por europeizar nuestro ordenamiento, consideran una intromisión que en Europa se pregunten qué desastre es este.
Dos observaciones. La primera es que la UE tiene todo el derecho a preguntar. Es un asunto de extraordinaria gravedad que afecta al Estado de derecho, al cómo y para qué se legisla y de qué manera se remedia el error en lo poco que puede tener remedio.
Segundo, parece poco inteligente que cuando España se dispone a desempeñar la presidencia de turno de la Unión en el segundo semestre de este año, el Gobierno directa e indirectamente se dedique a antagonizar a grupos y personalidades, en este caso, del Parlamento Europeo. Creer que la presidencia española va a ser un gran video de Parla en el que todos los demás serán figurantes en el guion escrito desde Moncloa para oscarizar a Pedro Sánchez es un grave error. Y se nota demasiado.