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Una política tributaria europea para la era digital

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La presidenta de la Asociación Española de Asesores Fiscales, AEDAF, Stella Raventós, y el economista e investigador principal de la Fundación Civismo, Javier Santacruz, moderados por el socio fundador y CEO de Análisis Económico Integral, Miguel Marín, han desgranado hoy los retos a los que se enfrenta la fiscalidad internacional en la era digital durante un diálogo celebrado en el marco de la cuarta jornada del curso FAES ‘Centrados en Europa’.

La economía digital está cambiando todos los paradigmas económicos y ha provocado la obsolescencia de los conceptos y normas sobre los que hasta ahora se sustentaba la fiscalidad internacional. Existe un amplio consenso sobre la necesidad de adaptar las normas tributarias por las que nos regimos al hecho digital. Lo que no está tan claro es si la solución debe alcanzarse a nivel multilateral, bajo los auspicios de organismos internacionales como la OCDE, que lleva años trabajando en una propuesta concreta, o a nivel nacional, como ya ha ocurrido en países que, como Francia, se han adelantado y han actuado por su cuenta.

“La recaudación es más una excusa a corto plazo de las necesidades financieras crecientes de los estados que un argumento sólido para establecer nuevos pilares en materia tributaria”, han explicado los participantes. “La cuestión central ahora es dirimir desde la base en qué nuevos instrumentos hay que fundamentar la fiscalidad en la era digital y generar un marco armónico en Europa”, han asegurado. En este sentido, “es muy probable que un marco de imposición indirecta sea más beneficioso. Las urgencias del corto plazo en materia de recaudación no deberían distorsionar los objetivos a medio plazo”. En el caso concreto de España, la denominada ‘Tasa Google’ “es una mezcla de imposición indirecta y directa y eso es un disparate”, han subrayado.

Finalmente, los panelistas han apostado por “replantear el sistema tributario español, darle sentido y unificarlo”. Quizá ahora no sea el momento pero “hay que ir hacia una fiscalidad más pensada, más clara y más simplificada”, han concluido.